El secretario de Estado de Seguridad y Orden Público, Carlos Munisaga, junto al Crio. Gral. Luis Martínez, jefe de la Policía de San Juan, y el Crio. Gral, Adrián Córdoba, jefe de la Dirección de Coordinación Judicial D-5, en conferencia de prensa online brindaron detalles de las investigaciones que permitieron detener a una banda que perpetraba delitos en distintos departamentos del Gran San Juan.
El secretario de Seguridad destacó el trabajo que realiza la Policía de San Juan “concentrándose, no solo en este operativo histórico para contener la propagación de COVID-19 como parte del Plan de Seguridad diseñado por el Gobierno, pero también cumpliendo la función que le corresponde a la policía por naturaleza dentro de nuestro sistema institucional que es el servicio de seguridad”.
Munisaga detalló que la investigación que llevó adelante el D-5 y la División Robos y Hurtos permitió desbaratar una banda que cometía hechos delictivos en Santa Lucía y Chimbas.
Por su parte, el jefe de la Policía de San Juan, tras felicitar a todos los miembros de la institución policial y en especial al área de Investigaciones que “en distintos procedimientos ha esclarecido y neutralizado personas que se dedican a lo ilícito”, resaltó el apoyo recibido por las autoridades gubernamentales “para concretar las tareas que nos han encomendado y con las que la Policía está comprometida”.
Tras ello, el jefe del D-5 detalló que la investigación encarada por el personal de la División Robos y Hurtos arrojó como resultado “tras varios allanamientos, la detención de tres personas mayores de edad, de 19 y 20 años, y el secuestro de armas que utilizaban para cometer los delitos en la zona de El Mogote, en Chimbas y en la zona este de Santa Lucía”. El comisario Córdoba explicó que la banda ingresaba violentamente a los domicilios e intimaba a los dueños y que seis familias han reconocido sus pertenencias.
Parte de la Policía de San Juan
Personal de Dirección Coordinación Judicial D-5 a cargo del comisario deneral Adrián Córdoba, de manera conjunta con personal de Robos y Hurtos, durante los últimos días del corriente mes toma conocimiento que el 6 agosto del actual, sobre las 22 hs ingresaron a la vivienda ubicada sobre calle Rodríguez antes de calle Luna, y atacaron a una señora de apellido Vera, quien se encontraba acompañada de sus hijos menores. En ese domicilio los delincuentes se llevaron un TV de 50 pulgadas y otros electrodomésticos. Todo lo cargaron en un automóvil marca VW Gol Trend de la familia para darse a la fuga en el mismo rodado, el cual más tarde apareció abandonado en el interior del barrio Colón en Santa Lucía.
El 10 agosto fueron autores de dos hechos. Sobre las 22 hs ingresaron a la vivienda de la familia Jofré, en inmediaciones de calle Rodríguez y Oratorio en Chimbas, de donde se llevaron los teléfonos celulares y algo de dinero en efectivo. Esa misma noche, sobre las 23.30 hs ingresaron a la vivienda de la familia Gordillo, en inmediaciones de calle Benavídez y Zapata, de donde se llevaron dinero en efectivo y los teléfonos celulares de todos los integrantes de la familia.
Luego de realizar tareas investigativas, se dio con los autores de los hechos, tratándose de:
Noé Moreno, de 19 años, residente del asentamiento Pedro Echagüe, en Santa Lucía
Daniel Álvarez, de 19 años, residente de la villa El Milagro, en Chimbas
Carlos Nicolás Leal, de 20 años, residente de la Villa Juan XXIII, en Chimbas.
Estos jóvenes delincuentes venían castigando desde hacía meses la zona conocida como Colonia Richet Zapata, particularmente las viviendas situadas en calle San Juan, Angualasto, Cordillera de los Andes e inmediaciones, y en las últimas dos semanas se extendieron al departamento Chimbas.
Se logró el secuestro de los siguientes efectos:
Varios TV, equipos de música, barra de sonido, casco de realidad virtual, mochilas y otras prendas, afeitadoras, planchitas y secadores de cabello, horno eléctrico, herramientas, ventiladores de pie, una trompeta, tablets y un gran número de teléfonos celulares. También se secuestraron armas: un machete de gran tamaño con el que amedrentaban a sus víctimas junto a un rifle aire comprimido y una réplica de escopeta dos caños.
Nota: si bien hasta la fecha seis familias reconocieron algunos de los efectos que fueron secuestrados en los allanamientos, se espera que en los próximos días más personas puedan reconocer como propios elementos entre los secuestrados, ya que se presume que estos delincuentes eran quienes operaban en las inmediaciones.
