Le quitaron el título a Tomás Vidal, el alumno que festejó haber rendido su última materia disfrazado de víctima de femicidio.
La Universidad Empresarial Siglo 21, de la ciudad de Córdoba, se vio envuelta en una vergonzosa y deplorable situación junto a un alumno, Tomás Vidal. El joven tenía puesto un pañuelo verde y una soga al cuello en modo de burla a los femicidios y la lucha feminista. Sanción: deberá recursar la última materia, volver a presentar la tesis y hacer una asignatura sobre Diversidad de Género. Sin embargo, ¿es eso suficiente?
Los femicidios son reales, es preocupante el hecho de que se tome el tema para el humor, la burla y la parodia. Es inaceptable que un hombre, en cualquier ámbito, realice «bromas» al respecto. No es un tema gracioso. No es un tema menor. Que un alumno haya hecho un acto de este tipo, revela la indignante realidad: aún hay gente que inferioriza la lucha feminista. Más de setenta millones de asesinatos contra mujeres en un año en el mundo ¿parece una cifra menor?
Basta de disminuir, normalizar y celebrar actos de este tipo. Si conoces a alguien que se comporte de forma inapropiada, se burle, disminuya o descalifique el movimiento feminista, paralo. No es un chiste, es la vida de una mujer, una madre, una hermana, una amiga. Basta de juegos.
Si sufrís violencia de género, llama al 144. Línea gratuita, anónima, nacional y disponible las 24 horas del día, los 365 días del año.
