El nivel de consumo minorista de los argentinos anotó en agosto una caía del 0,8% mensual y acumuló así una baja del 4,7% en lo que va del año, y va rumbo a cerrar a la baja en 2018.
Así lo informó el Indicador Mensual de Consumo (IMC) elaborado por el Instituto de Trabajo y Economía de la Fundación Germán Abdala.
«El consumo parece no encontrar piso, afectado por una creciente inflación que alcanzó el 3,9% en agosto según el reporte del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC)», dice el informe.
El consumo cae principalmente por el encarecimiento del costo de vida y por la escasez de créditos en un sistema financiero que ofrece préstamos de corto plazo con un costo financiero total que alcanza el 80% anual.